SUPERAR UNA RUPTURA

Alguien llamó a mi puerta y dijo llamarse septiembre. Le deje entrar, le presente a mi amiga la soledad y charlamos los tres durante un rato esperando que entrara el otoño. Creo que se avecina un invierno duro y frio. Aquel del que mi corazon no puede abrigarse. Mirando a través de mi ventana me preguntaba si volveria a ser feliz. Pienso que en la maleta en la que ella se llevó sus cosas tuvo por equivocación que coger de mi armario mi felicidad ya que desde que se marcho no logro encontrarla. He buscado en mis recuerdos y se que tiene que tenerla ella porque yo era feliz cuando estaba a su lado.

Damos la bienvenida a Julio y Agosto, el tiempo pasa pero yo sigo como si no me enterara de nada. Lo mejor del verano es el tiempo que tienes para hacer deporte y tomar el sol. Lo peor, los días duran más y todo pasa más lentamente,las horas y los minutos son más largos. Verdaderamente pienso que desde que me ha pasado esto dudo que 1 minuto tenga 60 segundos. Hoy me ha llamado mi hermana preguntandome si me gustaria irme con mis padres a la playa. He dado como respuesta un silencio. Por una parte me gustaria evadirme, marcharme muy lejos, por otra, pienso que si me marcho y quisiera volver conmigo, si yo no estoy aqui, no va a poder encontrarme. Veo que continuo siendo un ingenuo. En mi inmaginacion la veo como me llama al movil y me dice que ha cometido un error, que quiere volver conmigo, que la perdone, que soy el hombre de su vida. Un pitido de un coche por la ventana hace que vuelva a la realidad, la cruda realidad. Creo que paso más tiempo imaginando que viviendo. Mal vamos, por